Además de erigirse como la mejor feria que se haya vivido en la ciudad, la 254 edición de la feria de los angelitos también genero un remanente favorable entre los ingresos y egresos.
Así lo informaron este viernes autoridades municipales, así como el encargado de los trabajos de organización Elías López Barrios durante conferencia de prensa a medios informativos.
Luego de afirmar que, hubo una extraordinaria respuesta reflejada en una asistencia con cifra récord y que fue cumplido, el objetivo de llevar diversión y esparcimiento sin costo se resaltó que, fue celebrada por todo lo alto a la patrona diocesana de ‘Nuestra Señora de los Ángeles’.
Aunado a que se vivió la solemnidad del año de la Familia con devoción y gran afluencia de foráneas y peregrinaciones.
Sobre lo recaudado de la celebración tuvo ingresos mayores a 4 millones de pesos y egresos por 3 millones 700 mil pesos.
Como es costumbre el remanente fue dividido correspondiendo el 50 por ciento al ayuntamiento y el 50 por ciento restante a la parroquia.
El porcentaje de la alcaldía será aplicado en mejoras de calles y de antemano este viernes se dio banderazo simbólico a pintura de guarniciones frente a la iglesia de los angelitos aunado a que se llevará avante pintura de fachadas para mejorar la imagen urbana.
Se destacó que la presentación de este informe financiero pone de manifiesto el compromiso de este comité y organizadores en ofrecer total transparencia, lo cual demuestra que se hicieron bien las cosas.
Así mismo se subrayó el gran apoyo de diversas áreas del gobierno municipal en funciones, en diversos rubros como seguridad, limpieza, movilidad, protección civil por citar parte.
Entre las áreas de oportunidad que marcaron la diferencia de esta edición se encuentra el teatro de pueblo, con gran calidad y sin ninguna cancelación de artistas, de ahí que siempre se registró lleno total en el foro habilitado.
Es de esta manera, que culmina la edición 255 de esta festividad patronal, la cual fue denominada la fiesta del encuentro familiar, manteniéndose como una tradición que perdura.